Leonel Fernández, como buen mercadologo nos sigue haciéndo chistes llenos de mal gusto.

EL COMENTARIO DE LA NOTICIA:- El Presidente Leonel Fernández nos tiene acostumbrado a los chistes de mal gusto, como buen mercadologo que es, y ahora nos hace el de llamar a los funcionarios a cumplir la ley de licitación pública, la cual obliga a todo jefe de una institución pública o semi estatal a realizar licitaciones públicas para sus compras, cuando el primer violador de las leyes es el Primer Mandatario, cuando el compra directamente, sin las licitaciones correspondientes, tal como el caso de la compra de los Aviones Tucanos, viola la ley del 4% a Educación, viola la ley del 2% a Salud Pública, viola la ley del 10% a los Ayuntamientos, viola la Constitución de la República con el caso de la Sun Land, en fin, el violador pidiéndo que no se viole.

Es el Presidente Leonel Fernández el primer ciudadano que debe predicar con su ejemplo, pero es el que predica las violaciones a la leyes, por lo que el pueblo, las grandes fuerzas vivas de la Nación deberían exigirle que se someta al imperio de la ley.

               QUIERE IMITAR EN LO MALO A BALAGUER, PERO NO EN LO BUENO

Cuando el Doctor Joaquín Balaguer gobernaba, él lo dejaba hacer y deshacer, pero siempre se cuidaba de hacer él lo correcto, lo que le mandaba la ley, y aquel que se descarrilara en forma muy obstentosa, pagaba sus consecuencias. Balaguer, mes tras mes, publicaba escrupulosamente en todos los diarios del país lo que se recaudaba y su forma de invertirlo. Se publicaba hasta el más mínimo centavo recarudado y su forma de ser invertido, una forma que en gran medida ponía cierto freno a la corrupción administrativa del Estado, cosa que en reiteradas ocasiones el PERIODICO FLECHA CLEMENTE, Su Diario Digital de Santo Domingo Oriental, el País y el Mundo, le pidió y le seguimos pidiendo al Presidente Leonel Fernández, si en verdad los deseos de combatir la corrupción administrativa en el Estado Dominicano son realmente sinceros, porque hasta ahora todo lo que se demuestra son poces de proyección de imagen y no de combatir ese cáncer que corroe los cimientos de la sociedad dominicana.