EL COMENTARIO DE LA NOTICIA:- La negativa a que en el país se legisle para la difusión de treinta y un, (31), años de historia y que la misma sea borrada o negada, también deberían propugnar para que todos los dominicanos nacidos en esa parte de la historia dominicana, sean borrados del mapa de la República Dominicana, porque todo lo que tienda a conocer la auténtica historia sobre los Treinta y Un (31), años de gobierno de Rafael Leonidas Trujillo Molina, que tuvo sus hechos malos y bochornosos, pero que también tuvo sus hechos de luces, debe ser conocido con lujo de detalles por todos los dominicanos. ¿ Es qué acado hay personeros del antitrujillismo comercial que no quieren que salgan a relucir, en ese museo, hechos históricos que les dejarían mal parados?. Negar el Museo de los treinta y Un, (31), años de gobierno de Rafael Leonidas Trujillo Molina, es un hecho que atenta contra la libertad de información, es un hecho que atenta contra la educación, es un lecho que no se compadece en un país de auténtica esencia democrática y donde el pluralismo de la ideas están consagradas en la Constitución de la República, por lo que no se explica la actitud de algunos sectores que a toda costa desean desconocer un acontecimiento que forma parte esencial de la historia del país. ¿ A qué le tienen miedo ?, ya el cuco no existe, lo que si existe es un antitrujillismo comercial vergonzante y los que se guillan de antitrujillistas para hacer que el Museo no sea creado, están procediéndo con los mismos métodos antidemocráticos que empleara el dictador.
LEIVEN GUERRERO procedió correctamente al someter el proyecto de Ley que crea el Museo histórico de los treinta y un, (31), años de gobierno férreo de la dictadura trujillista que muchas generaciones de dominicanos deben conocer, porque ella no puede, aunque querramos, ser borrada como pretenden los que viven del antitrujillismo y procediéndo igual que el tirano, negándo los principios básicos de toda sociedad democrática. Ok.
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